Somos una casa de campo con características familiares cuya imagen fue plasmada a partir del año 2009 cuando Juan Francisco Sosa Barreno y su esposa Rosita Cisneros Albuja, una vez retirados de su actividad laboral y su familia decidieron incorporar a su vida un lugar para descanso y recreación en el campo, buscaron un lugar acogedor en el cual Juan Francisco pueda cumplir su afición y gusto por las cabalgatas y además de la naturaleza.
Así fue que localizaron un espacio de campo muy especial con espacios planos, declives y que posee un mirador natural desde el cual se observa como el cielo se une con las elevaciones de la cordillera centro - oriental de los Andes, gran parte del callejón interandino y se puede contemplar en toda su majestuosidad a los volcanes.
Este paisaje agasaja la vista en todas las épocas del año con el cambio del clima y sus particularidades.